En estos días tan fríos de invierno, al llegar a casa, se agradece tener algún tipo de calefacción. Una de las más socorridas es la clásica estufa. Si tienes que comprar una, si acudes a una tienda o visitas una web de electrodomésticos online enseguida verás que hay una gran cantidad de modelos. Pero lo primero que llama la atención es que hay dos clases de estufas: de gas y eléctricas. Ahí ya surge la duda, ¿cual compramos?
Y la verdad, no es que una clase de estufa sea mejor que otra. Cada una tiene sus características, sus ventajas y sus desventajas.
La Seguridad
Cuando pensamos en estufas, lo primero que nos viene a la cabeza es la seguridad. Sobretodo si tenemos en casa niños pequeños o personas muy mayores. Durante mucho tiempo, las estufas de gas han estado en el punto de mira por respecto a este tema. Pero lo cierto es que, hoy en día, podemos afirmar que, con un buen mantenimiento, se trata de estufas realmente seguras.
La normativa actual exige una serie de mecanismos mínimos para su fabricación. Entre ellos podemos encontrar desde el cierre de la salida de gas cuando no existe llama, hasta controladores de gas en el ambiente.
De todas formas, si vamos a utilizar una estufa de gas, siempre es importante ventilar adecuadamente la habitación donde vayamos a colocarla. Esto es debido a que este tipo de estufas generan una gran cantidad de vapor de agua, aumentando sensiblemente la humedad ambiental. Además, su combustión disminuye el oxígeno, pudiendo producir monóxido de carbono.
En cambio, las estufas eléctricas ganan en fiabilidad al no emitir ningún tipo de sustancia tóxica ni provocar humedades. Por ese motivo son recomendables si tenemos niños o para espacios pequeños.
Estufas de gas o eléctricas, ¿qué sale más barato?
A priori, una estufa eléctrica suele ser más barata que una de gas. En cambio, su coste energético es bastante más elevado. De esta manera, a la larga, suelen ser más costosas. De hecho, una estufa eléctrica de 1000 W tiene un consumo equivalente a 18 bombillas de 60 W encendidas a la vez.
Por otro lado, aunque las estufas de gas suelen ser más caras, el precio de gas es más barato y su consumo energético es inferior. Por ese motivo, una estufa de gas es energéticamente más eficiente y, a la larga, más barata.
Teniendo esto en cuenta, una estufa eléctrica suele estar recomendada para estancias pequeñas y las de gas para habitaciones más amplias.
Otras diferencias entre estufas de gas y eléctricas
Una de las diferencias más evidentes es sobre el proceso de calentamiento. Ambos modelos se calientan inmediatamente, pero las estufas eléctricas necesitan más tiempo para que el calor se distribuya por la estancia. Esto es debido a que las de gas emiten el calor de manera directa mientras que las eléctricas lo hacen por radiación.
Consecuencia de esto, es que las estufas eléctricas, al no tener llama, no corren el riesgo de apagarse accidentalmente por una corriente de aire. En cambio, las de gas si corren ese peligro, con el peligro consiguiente de que el gas pueda seguir corriendo.
En cambio, las de gas tienen la ventaja de que, al apagarlas se enfrían inmediatamente. A diferencia de las eléctricas que suelen demorarse un buen rato.
Por otro lado, las de gas pueden funcionar de manera autónoma de forma que las podemos llevar allá donde queramos. Además, al no depender de la corriente, no están expuestas a los cortes de luz. En cambio, una estufa eléctrica siempre debe de tener cerca una toma de corriente. Pero por otro lado son mucho más livianas, no ocupan tanto espacio y no tienen tantos problemas de limpieza como las de gas.
A modo de recomendación
Un poco a modo de resumen, un poco a modo de recomendación, te recomendamos la estufa de gas:
- Si tienes pensado utilizarla en una estancia amplia y bien ventilada ya que calienta rápidamente.
- Si quieres ahorrar, ya que el butano es barato y su consumo no es muy elevado.
- Si tienes pensado utilizarla prolongadamente.
Así mismo, te recomendamos la estufa eléctrica:
- Si tienes niños pequeños en casa.
- Si tienes pensado utilizarla en el dormitorio.
- Si tienes pensado utilizarla durante cortos períodos de tiempo.
¿Y tú qué prefieres, la estufa de gas o la eléctrica?
Fuente de las imágenes: Vivir Smart