LMX 64H, lo mejor de dos mundos
Con el auge del uso de la bicicleta, que está previsto vaya en aumento, ahora es el mejor momento para para presentar diferentes alternativas en este sentido. Este éxito “in crescendo” del vehículo a pedales es parejo a la revolución que están causando los vehículos eléctricos, como por ejemplo, las motocicletas.
Entre las conocidas ventajas de las motocicletas eléctricas, además de no emitir emisiones contaminantes y ser silenciosas, está la de no tener que repostar en estaciones de servicio tradicionales. Su recarga eléctrica es más económica que el combustible, requiere menor mantenimiento y sus reparaciones son menos complicadas.
No resulta extraño que la prestigiosa empresa francesa LMX, fabricante de motocicletas y bicicletas eléctricas, presenta un sorprendente prototipo de motocicleta eléctrica ligera, con apariencia de bicicleta: la LMX 64H. Se trata de una versión homologada de su bicicleta de montaña con el mismo nombre, la LMX 64, y que en su versión motocicletas incorpora dos cadenas cinemáticas paralelas. Una de estas cadenas corresponde a la de una bicicleta tradicional, y la otra está impulsada por su motor eléctrico de 2,5 kW.
En su lado derecho, la LMX 64H presenta la trasmisión de una bicicleta: cadena, caja de cambios y manivelas. En su lado izquierdo hay otra cadena mayor, con un motor eléctrico que transmite energía a un piñón trasero. La velocidad máxima que puede alcanzar este vehículo es de 45km/hora, pudiendo ser usada como bicicleta, motocicleta o ambas cosas, ya que puede utilizarse el pedaleo asistido.
Los 50cc de la motocicleta del futuro
Una de las característica de los vehículos futuristas, será que solucionen los problemas energéticos medioambientales. No sabemos cuándo será posible que todos los vehículos cumplan este requisito, pero la LMX 64H es uno de los que abre camino en este sentido. Actualmente los vehículos eléctricos son un sector en alza, si bien su progresión en el mercado, por el momento es más lenta de lo deseado: nos jugamos el futuro en ello.
Ese es otro de los motivos por los que un ciclomotor eléctrico que hace las veces de bicicleta, sea una excelente forma de familiarizarse con los vehículos eléctricos. Además de lo práctico que resulta para desplazarse por la ciudad, es mucho más asequible que un coche. Y la ligereza de su peso también es otra ventaja. La LMX 64H pesa unos 28 kg y tiene una batería extraíble de 52 V y 857 Wh. Se estima que su su carga de 0 a 100% puede tener lugar en poco más de cuatro horas.
Uno de los datos más destacables de la LMX 64H es que se trata de la primera bicicleta eléctrica en Europa con homologación L1e-B de ciclomotor. Esto significa que puede llevar matrícula, luces, espejo y el reto de los componentes necesarios, que pueden variar dependiendo de la legislación de cada país.
Aunque su motor permitiría alcanzar una velocidad de incluso 75Km/h, por el momento la homologación para circular a esa velocidad de forma legal, no se ha conseguido. No obstante, los 45 km/hora que alcanza son perfectos para usarla en la ciudad.
Máxima tendencia en movilidad por la ciudad
Que cada vez es más frecuente ver bicicletas y patinetes circulando por la ciudad, es una realidad cotidiana. Y la modalidad eléctrica seguirá aumentado de forma previsible, detalle que no ha escapado al sector empresarial que produce estos vehículos.
Una de las ventajas de la LMX 64H es que su sistema de doble transmisión permite motorización de alta potencia en cualquier terreno. Consta de dos modos de uso y hasta tres niveles de potencia, funcionando con un ATV eléctrico básico. Sus tres niveles de potencia permiten sacar el máximo partido, siendo posible liberar toda su potencia mediante la aceleración incluida en la parte derecha del manillar.
La persona que conduce la LMX 64 puede escoger entre utilizar solamente el acelerador de mano, y en es caso la tracción se produce a través de la transmisión izquierda, solo eléctrica. La batería removible es de 52 voltios, y tiene una capacidad de 857 Wh, lo que asegura una buena autonomía también con la sola tracción eléctrica.
Los fundadores de la compañía francesa creadora de la LMX 64H aseguran que esta motocicleta-bicicleta permite superar fácilmente pendientes prohibitivas para una e-MTB normal, y el sensor de potencia de los pedales hacen posible adaptar el soporte del motor a las exigencias requeridas por el terreno.
En el uso urbano cotidiano la LMX 64H es más que práctica, siendo al mismo tiempo usada en excursiones de envergadura por la montaña.
Se prevee que en el verano del 2020 saldrá a la venta la LMX 64H, con un precio estimado de unos 5000 euros para las primeras 30 compras, y un precio final de una 5.760 euros. Un vehículo único en el mundo homologado en Europa como ciclomotor, que sin duda dará mucho y hablar, y otro tanto que recorrer.
